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¿Cuándo un despido no es improcedente?

Que te despidan del trabajo es doloroso, y es natural sentir que un empleador te ha hecho un flaco favor si te despiden. Muchas personas hablan de despido improcedente en los días siguientes a la pérdida del empleo, a menudo por conmoción o rabia. En realidad, hay muchas razones por las que un empresario puede despedirle y sólo determinadas circunstancias dan lugar a reclamaciones por despido improcedente.

Un empresario casi siempre puede despedir a alguien si no cumple con su trabajo. Si un empresario puede demostrar que no estás a la altura de las expectativas del puesto -aunque te esfuerces al máximo-, normalmente puede despedirte por falta de rendimiento. El hecho de que te presentes todos los días y des el cien por cien de ti no significa que el despido sea improcedente.

Un empresario también puede despedir a alguien -aunque esté rindiendo- por motivos económicos o financieros. Puedes ser el mejor empleado de la empresa, pero si no pueden pagarte, no pueden mantenerte como empleado.

En algunos casos, un empresario puede despedirte porque no funcionas bien en un determinado entorno o equipo. No es lo mismo que te despidan porque no les guste tu raza, sexo o nacionalidad; puede que simplemente la dinámica del equipo no funcione.

El despido improcedente es diferente de este tipo de circunstancias. El despido improcedente suele ser un acto de represalia o un acto de discriminación. Si cree que perdió su trabajo a causa de su razaSi ha denunciado una infracción de seguridad u otro motivo de preocupación, hable con un abogado sobre las opciones que tiene para obtener reparación.

Fuente: FindLaw, "Represalias y despido improcedente," consultado el 14 de abril de 2017

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