Como empleado, es importante que sepas que puedes obtener una indemnización por lesiones laborales. Si trabajas día tras día en el mismo puesto, existe la posibilidad de que sufras una lesión por esfuerzo repetitivo. Esta lesión se produce cuando se hacen los mismos movimientos muchas veces, forzando los músculos, ligamentos y articulaciones.
A veces, lesiones por esfuerzo repetitivo requieren atención médica. Por ejemplo, si escribes a máquina en tu trabajo, es posible que desarrolles tendinitis o túnel carpiano. Ambos pueden requerir cirugía, analgésicos u otras intervenciones médicas. La buena noticia es que tu seguro de accidentes de trabajo debería cubrir todas tus necesidades médicas.
Presentar una reclamación por lesiones repetitivas es importante si sufre alguna lesión derivada de su trabajo diario. Debe comunicar a su empresario que ha recibido atención médica por una lesión o que desea hacerlo. A continuación, debe ayudarle a presentar una reclamación a la compañía de seguros de compensación de los trabajadores.
Su empleador no puede impedirle presentar una reclamación. Si tiene dificultades para presentar una reclamación debido a la intervención de su empleador, entonces debe hablar con su abogado sobre los siguientes pasos a seguir.
Si consigues presentar la reclamación, podrás recibir la atención médica que necesitas de inmediato. En la mayoría de los casos, la indemnización por accidente laboral aprueba sin problemas las lesiones que se producen en el trabajo. Si te deniegan la reclamación por algún motivo, puedes recurrir la denegación con información sobre tu lesión y hechos que la relacionen con tu lugar de trabajo.
Una vez que reciba la aprobación de su reclamación y busque atención médica para su lesión, recuerde que puede necesitar tiempo para curarse. Si necesitas ausentarte del trabajo, la indemnización por accidente laboral debería empezar a cubrir también una parte de los salarios perdidos, para que puedas centrarte en recuperarte.
Para la mayoría de las lesiones por distensión, un buen protocolo a seguir es descansar la zona sobrecargada, estirarla suavemente y utilizar calor o hielo para tratar el dolor. En algunos casos, el médico puede recetar analgésicos o relajantes musculares. Algunos ordenarán fisioterapia para ayudar a ajustar la postura o tratar problemas de funcionamiento del cuerpo.
En muchos casos, estas lesiones se curan solas con el tiempo. Con suficiente descanso y tiempo para recuperarte, podrás sentirte mejor.